¿Por qué sucede esto? La falta de vocaciones –cada vez menos jóvenes optan por este marco laboral por ausencia de proyección e incentivos– y el envejecimiento del sector –en los últimos 10 años han descendido notablemente los profesionales menores de 40 años– están poniendo en jaque la renovación de unos perfiles laborales con elevada demanda y alta inserción en el mercado laboral, situándonos ante una gran paradoja.
Las políticas europeas, desde las que se impulsa la renovación del parque edificado bajo criterios de eficiencia energética, son una gran oportunidad en términos de trabajo. Por ejemplo, si nos fijamos en el sector de la calefacción, encontramos que un 75% de los equipos están obsoletos o son ineficientes (según el informe El mercado de la calefacción en España y en Europa, publicado por FEGECA), por lo que será necesaria su sustitución en los próximos años.
Si hablamos de calefacción central, esa necesidad es ya urgencia. Este mes de septiembre finaliza el plazo para que los inmuebles obligados por ley (Real Decreto de 2020, por el que se regula la contabilización de los consumos individuales de calefacción) finalicen la instalación de repartidores de costes de calefacción. Según datos de ISTA, en España cerca de 1,5 millones de viviendas deberían realizar esta transición, sin embargo, en la actualidad solo un 35% han llevado a cabo la individualización de los consumos.
La instalación de los repartidores de costes, además de ventajas desde el punto de vista de la eficiencia energética o el ahorro familiar, también presenta aspectos positivos en términos de empleo. Se calcula que la instalación y gestión de sistemas de medición individual generará en España un total de 2.000 puestos de trabajo, directos e indirectos y moverá un volumen de negocio de unos 150 millones de euros para el colectivo de los profesionales en instalaciones térmicas en España.
Toda una oportunidad que viene acompañada de una interesante oferta de cursos de formación por parte de entidades profesionales y empresas, que buscan disponer de mano de obra cualificada. En el caso de ISTA, la compañía cuenta con su propia plataforma de formación on line, CampusISTA, donde los profesionales podrán mejorar su conocimiento del sector y recibir una acreditación como instalador homologado ISTA.
Si estás pensando en ampliar tu formación o deseas acceder a otro nicho de empleo, te animamos a descubrir una profesión, la de instalador de repartidores de costes, con gran proyección de futuro.