El edificio, que cuenta con calefacción central de gas natural, ha logrado reducir la demanda de combustible en un 38,40%, es decir, cada familia ha ahorrado 805€ en su factura anual. Además, se han dejado de emitir 8,37 toneladas de CO2 a la atmósfera, contribuyendo a la lucha contra el calentamiento global.
¿Cómo lo han conseguido? De una manera sencilla y muy racional:controlando el gasto mediante la instalación de repartidores de costes y válvulas termostáticas, combinadoscon el uso de SOPHIA. Este pequeño módulo se instala en la sala de calderas de manera rápida, sin necesidad de interrumpir el servicio de calefacción central.
Una vez iniciado, SOPHIA monitoriza el funcionamiento de la calefacción, recopilando datos sobre el consumo de cada vivienda, la temperatura exterior, presión, etc., para obtener la curva de calefacción óptima. De esta manera, se consigue un rendimiento más eficiente de la calefacción, con ahorros superiores al 30%.
Así lo demuestran los datos obtenidos en esta comunidad de propietarios de Valladolid. ¡Y no es la única! Ista ha estudiado el consumo en 10 comunidades de propietarios a lo largo del pasado año, observando ahorros que van desde el 20% al 38%.
Además, SOPHIA también ofrece una serie de ventajas adicionales: un funcionamiento silencioso, la incorporación de alarmas por detección de fugas u otras incidencias y el control del tratamiento antilegionela, que sube automáticamente la temperatura del circuito del agua ante cualquier indicio de existencia de la bacteria.
Desde ista recuerdan que el principio para realizar un consumo más eficiente de la calefacción es conocer los hábitos de consumo de cada hogar, para ello herramientas como SOPHIA son grandes aliados. Al mismo tiempo, la compañía insiste en la necesidad de que las viviendas con calefacción central cuenten con repartidores de costes de calefacción, de manera que cada hogar pague por lo que consume y puede realizar un uso más consciente y efectivo del calor, como ya están haciendo los vecinos de Niña Guapa.
